Lo de tener amantes siempre puede ser peligroso, aunque realmente el peligro corre por parte del amante en muchos casos, si te visita por sorpresa un marido con una cornamenta como la de la foto.
Y sobre todo si algunas veces parezca mucho más fácil hacerlo en casa, nunca esta de más cogerse un hotelito, para evitar disgustos como el que le paso a este señor...
Así a bote pronto, me imagino el cachondeo de los vecinos y viandantes, y no he querido saber si marido (que tiene muchas cosas en la cabeza) llego a encontrarlo! mejor no saberlo. En fin, supongo que este hombre se estaría acordando de esta canción de barricada (si la conocía).
Hombre, intuyo que el señor que está asomado a la ventana era el marido por lo que se podría decir que sí le encontró :-}
ResponderEliminarCago en tóoo!!! a partir de hoy escribo en el blog con las gafas de cerca
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